martes, 22 de marzo de 2011

Reforma a la Educación Superior: Muchos temas neurálgicos dejados por fuera


Juan José García Posada
Juan José García Posada

Los misterios de la educación

Juan José García Posada | Medellín | El Colombiano. Publicado el 21 de marzo de 2011
Ojalá fructifique el nuevo debate sobre la propuesta gubernamental de reforma de la Ley 30 de 1992, para regular la educación superior, que se guardaba con misterioso sigilo. De una primera lectura me he formado la impresión de que es vacua e instrumental y no marca una tónica innovadora como para sincronizar el régimen educativo colombiano con los desarrollos globales más avanzados.

Un problema de impacto es el económico: No hay que escandalizarse con la aportación necesaria del sector privado al desarrollo de los fines universitarios. El tema llevado y traído de la privatización es engañoso y a veces se trata sin seriedad y con un toque notorio de demagogia. Sin embargo, se ha insistido en estos días en que el proyecto tiene un marcado acento neoliberal y mercantilista. ¿Están llegándonos las ondas del Acuerdo de Bolonia? La discusión está abierta.

¿Cómo evitar que se desnaturalice la educación superior como "servicio público cultural inherente a la finalidad social del Estado" (artículo primero, de los 164 del proyecto), si se autoriza el funcionamiento de IES con ánimo de lucro y cómo impedir la infiltración de empresas de negocios y tentáculos de organizaciones monopolísticas interesadas en utilizar la tarea educativa como pretexto para acumular dinero?

Debe aclararse el asunto de la obligatoriedad o la voluntariedad de la acreditación institucional. Si para sostenerse como universidad una corporación debe acreditarse, sólo conservarían ese carácter, de universidad, las veintiuna, de ochenta, que hasta ahora se han acreditado. Más de cincuenta pasarían a ser IES.

¿Por qué, si el gobierno pretende alcanzar consenso de la comunidad universitaria, se demoró tanto para divulgar el texto del proyecto y ni el Presidente ni la Ministra les dieron oportunidad de expresarse a ochenta rectores que debieron guardar respetuoso silencio y abstenerse de exponer puntos de vista durante la sesión de cincuenta minutos realizada hace dos semanas en Bogotá?

¿Si hay cuestiones de importancia capital en el debate educativo, como la internacionalización, la movilidad y la doble titulación, el hecho de que sólo se traten de pasada en el proyecto indica desdén por los temas puros y duros de la vida universitaria y por lo que ha de ser la presencia de la universidad colombiana en el contexto mundial?

¿Se mantendrá en el Congreso el proyecto presentado por el anterior gobierno y será cierto que el Ejecutivo pretendería apostarle también a aquella iniciativa en caso de que la nueva colapse, o tendrá suficiente apoyo en el Legislativo como para que se archive la propuesta del pasado cuatrienio y tenga luz verde la que está empezando a discutirse?

¿El gobierno impondrá el proyecto, o aceptará críticas y ajustes del sector universitario? Al divulgarlo, al menos empezó a despejar tanto misterio. 

Reforma a la Educación Superior: Muchos temas neurálgicos dejados por fuera


Juan José García Posada
Juan José García Posada

Los misterios de la educación

Juan José García Posada | Medellín | El Colombiano. Publicado el 21 de marzo de 2011
Ojalá fructifique el nuevo debate sobre la propuesta gubernamental de reforma de la Ley 30 de 1992, para regular la educación superior, que se guardaba con misterioso sigilo. De una primera lectura me he formado la impresión de que es vacua e instrumental y no marca una tónica innovadora como para sincronizar el régimen educativo colombiano con los desarrollos globales más avanzados.

Un problema de impacto es el económico: No hay que escandalizarse con la aportación necesaria del sector privado al desarrollo de los fines universitarios. El tema llevado y traído de la privatización es engañoso y a veces se trata sin seriedad y con un toque notorio de demagogia. Sin embargo, se ha insistido en estos días en que el proyecto tiene un marcado acento neoliberal y mercantilista. ¿Están llegándonos las ondas del Acuerdo de Bolonia? La discusión está abierta.

¿Cómo evitar que se desnaturalice la educación superior como "servicio público cultural inherente a la finalidad social del Estado" (artículo primero, de los 164 del proyecto), si se autoriza el funcionamiento de IES con ánimo de lucro y cómo impedir la infiltración de empresas de negocios y tentáculos de organizaciones monopolísticas interesadas en utilizar la tarea educativa como pretexto para acumular dinero?

Debe aclararse el asunto de la obligatoriedad o la voluntariedad de la acreditación institucional. Si para sostenerse como universidad una corporación debe acreditarse, sólo conservarían ese carácter, de universidad, las veintiuna, de ochenta, que hasta ahora se han acreditado. Más de cincuenta pasarían a ser IES.

¿Por qué, si el gobierno pretende alcanzar consenso de la comunidad universitaria, se demoró tanto para divulgar el texto del proyecto y ni el Presidente ni la Ministra les dieron oportunidad de expresarse a ochenta rectores que debieron guardar respetuoso silencio y abstenerse de exponer puntos de vista durante la sesión de cincuenta minutos realizada hace dos semanas en Bogotá?

¿Si hay cuestiones de importancia capital en el debate educativo, como la internacionalización, la movilidad y la doble titulación, el hecho de que sólo se traten de pasada en el proyecto indica desdén por los temas puros y duros de la vida universitaria y por lo que ha de ser la presencia de la universidad colombiana en el contexto mundial?

¿Se mantendrá en el Congreso el proyecto presentado por el anterior gobierno y será cierto que el Ejecutivo pretendería apostarle también a aquella iniciativa en caso de que la nueva colapse, o tendrá suficiente apoyo en el Legislativo como para que se archive la propuesta del pasado cuatrienio y tenga luz verde la que está empezando a discutirse?

¿El gobierno impondrá el proyecto, o aceptará críticas y ajustes del sector universitario? Al divulgarlo, al menos empezó a despejar tanto misterio. 

Información veraz e imparcial: Fundamento de una ética comunitaria


Derecho a recibir "información veraz e imparcial"
"Se garantiza a toda persona la libertad de expresar y difundir su pensamiento y opiniones, la de informar y recibir información veraz e imparcial...". Artículo 20 de la Constitución Política.
Víctor León Zuluaga Salazar* - Medellín | El Colombiano. Publicado el 21 de marzo de 2011


El viernes anterior se efectuó en Bogotá el Seminario internacional acceso a la información pública, organizado por Transparencia por Colombia, la Relatoría Especial para la Libertad de Expresión de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, la Embajada Británica y la Fundación para la Libertad de Prensa, entre otras entidades que forman parte de la estrategia Más Información más Derechos.

En la primera parte de la agenda Elisabeth Ungar Bleier, directora de Transparencia por Colombia; Catalina Botero Marino, Relatora Especial para la Libertad de Expresión de CIDH-OEA, y Rodrigo Uprimny Yepes, director de DeJusticia, profundizaron sobre el marco jurídico y político del derecho de acceso a la información y sobre la propuesta de un proyecto de ley estatutaria que será llevado al Congreso de la República.

Por normas constitucionales y legales los colombianos tenemos derecho a saber todo lo que acontece en las distintas instancias del Estado, con pocas excepciones claramente establecidas por la ley. Sin embargo, los ciudadanos y los periodistas tenemos dificultades para acceder a la información.

La propuesta busca recoger en un solo cuerpo todas las normas dispersas, muchas de las cuales fueron concebidas de acuerdo con el espíritu de la Constitución de 1886.

Se aprecia un desconocimiento de este derecho fundamental de acceso a la información pública entre los funcionarios, los periodistas y los ciudadanos. Podría decirse que se extendió cierta práctica de secreto y reserva de información de interés general.

Estamos lejos de la proactividad oficial y de los estándares que han logrado países como México y Chile. Con frecuencia los funcionarios asumen la tarea de suministrar la información a un ciudadano y a un periodista como una dádiva y no como un deber de sujeto obligado por la Constitución, la ley y otras normas menores.

La información es un bien público, no un privilegio de algunos. La información da poder ciudadano para conocer los programas, servicios y beneficios. Permite conocer cómo marchan los planes y las obras y cómo se invierten los recursos públicos.

No basta la rendición de cuentas sobre los resultados de un programa específico y sobre lo ejecutado al fin del mandato. Es urgente que la ciudadanía reciba también, periódicamente, los informes de rendición de cuentas sobre los procesos.

Ahora se habla del derecho a saber. Nadie discute sus efectos saludables que produce en una sociedad. Hoy es un requisito de toda democracia madura. Si estamos bien informados, el voto será consciente y libre; los niveles de corrupción disminuirán considerablemente; los recursos para la población pobre llegarán efectivamente hasta los más necesitados; muchas tutelas y acciones populares y derechos de petición dejarán de interponerse.

El privilegio de la información no puede ser del funcionario y de sectores cercanos al gobierno. El país tiene ahora el reto de cambiar estas circunstancias de opacidad, para que más información pública se traduzca en más derechos para todos. 

Información veraz e imparcial: Fundamento de una ética comunitaria


Derecho a recibir "información veraz e imparcial"
"Se garantiza a toda persona la libertad de expresar y difundir su pensamiento y opiniones, la de informar y recibir información veraz e imparcial...". Artículo 20 de la Constitución Política.
Víctor León Zuluaga Salazar* - Medellín | El Colombiano. Publicado el 21 de marzo de 2011


El viernes anterior se efectuó en Bogotá el Seminario internacional acceso a la información pública, organizado por Transparencia por Colombia, la Relatoría Especial para la Libertad de Expresión de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, la Embajada Británica y la Fundación para la Libertad de Prensa, entre otras entidades que forman parte de la estrategia Más Información más Derechos.

En la primera parte de la agenda Elisabeth Ungar Bleier, directora de Transparencia por Colombia; Catalina Botero Marino, Relatora Especial para la Libertad de Expresión de CIDH-OEA, y Rodrigo Uprimny Yepes, director de DeJusticia, profundizaron sobre el marco jurídico y político del derecho de acceso a la información y sobre la propuesta de un proyecto de ley estatutaria que será llevado al Congreso de la República.

Por normas constitucionales y legales los colombianos tenemos derecho a saber todo lo que acontece en las distintas instancias del Estado, con pocas excepciones claramente establecidas por la ley. Sin embargo, los ciudadanos y los periodistas tenemos dificultades para acceder a la información.

La propuesta busca recoger en un solo cuerpo todas las normas dispersas, muchas de las cuales fueron concebidas de acuerdo con el espíritu de la Constitución de 1886.

Se aprecia un desconocimiento de este derecho fundamental de acceso a la información pública entre los funcionarios, los periodistas y los ciudadanos. Podría decirse que se extendió cierta práctica de secreto y reserva de información de interés general.

Estamos lejos de la proactividad oficial y de los estándares que han logrado países como México y Chile. Con frecuencia los funcionarios asumen la tarea de suministrar la información a un ciudadano y a un periodista como una dádiva y no como un deber de sujeto obligado por la Constitución, la ley y otras normas menores.

La información es un bien público, no un privilegio de algunos. La información da poder ciudadano para conocer los programas, servicios y beneficios. Permite conocer cómo marchan los planes y las obras y cómo se invierten los recursos públicos.

No basta la rendición de cuentas sobre los resultados de un programa específico y sobre lo ejecutado al fin del mandato. Es urgente que la ciudadanía reciba también, periódicamente, los informes de rendición de cuentas sobre los procesos.

Ahora se habla del derecho a saber. Nadie discute sus efectos saludables que produce en una sociedad. Hoy es un requisito de toda democracia madura. Si estamos bien informados, el voto será consciente y libre; los niveles de corrupción disminuirán considerablemente; los recursos para la población pobre llegarán efectivamente hasta los más necesitados; muchas tutelas y acciones populares y derechos de petición dejarán de interponerse.

El privilegio de la información no puede ser del funcionario y de sectores cercanos al gobierno. El país tiene ahora el reto de cambiar estas circunstancias de opacidad, para que más información pública se traduzca en más derechos para todos. 

Twitter: Viene convirtiéndose en una alternativa de comunicación rápida y efectiva


Twitter empodera al Yo ciudadano
Bloomberg | Las redes sociales como Twitter han demostrado que pueden ser de gran utilidad frente a eventos de gravedad y emergencia. El ejemplo más reciente ha sido el terremoto en Japón.

Twitter empodera al Yo ciudadano


QUIENES SOSTIENEN QUE las redes sociales sirven para poco, aún no conocen a aquellos que incentivan la solidaridad digital y la construcción de innovación por esta vía. La tecnología está lista para hacerle eco a los ciberciudadanos. Twitter cumple hoy cinco años.
Natalia Estefanía Botero | Medellín | El Colombiano. Publicado el 21 de marzo de 2011
Hay quienes se desconectan de las redes sociales porque el eco de lo que reciben les parece que aporta poco, dicen que es soso e improductivo.

Sin embargo, en la otra orilla hay quienes luchan porque sea útil, no sólo para su vida profesional y personal, sino en situaciones de emergencia o de convocatoria social.

Son los voluntarios digitales como lo es el ingeniero Juan David Correa, quien cree que un teléfono puede ser una de las pocas cosas que acompañe a una persona en el momento de un terremoto, como ha sucedido en los últimos episodios en Sendai, Japón, y en Haití.

En compañía de un grupo de apasionados del tema, ellos se encargan de generar mecanismos y dar a conocer cómo se puede utilizar la tecnología en situaciones claves.

Por ahora, privilegian a Twitter como el centro de la Brigada digital colombiana (#brigadadigital), una estrategia de ciberciudadanía creada por el Ministerio TIC.

Se han manifestado en la pasada ola invernal cuando utilizaron diversas estrategias para motivar la solidaridad no sólo para la recolección de donaciones sino a la hora de escuchar propuestas.

Sin embargo, el potencial de esta iniciativa de solidaridad 2.0 no se limita a un evento. Su filosofía, dice Correa, es "sumar fuerzas".

De hecho, trae a colación una cifra: durante el terremoto en Japón se llegó a contabilizar 1.200 mensajes de texto por segundo.

Durante una crisis, la rapidez con la que se obtenga información es básica para tomar decisiones, agrega Correa. Por ello, un medio, como una red social que incluye ubicuidad, concisión y geolocalización (cuando los celulares tienen GPS), quizás pueda hacer la diferencia.

¡Siempre lista!

Una de las preguntas que se hacen los usuarios de Twitter es cómo se prepara esta red para las contingencias o para operar en países donde hay censura.

Federico Builes, desarrollador de Software de StackBuilders, explica que en una época era frecuente ver que la popular "ballena" apareciera en la interfaz azul de Twitter. El mensaje era claro: había problemas para procesar el flujo creciente de mensajes. Sin embargo, basado en lo que se publica en el blog oficial sobre sus centros de datos, se deduce que aprendieron a "manejar cargas altas".

Indica que cuando se incrementa el flujo, deshabilitan funcionalidades que no son vitales como sugerir a quién seguir o el indicador de quién hizo retuit. Con ello destinan todos los servidores, en su totalidad, para garantizar la respuesta. Además, poseen la información en varios centros de datos en el mundo con lo cual si uno falla otro lo respalda.

Hay estrategias también que permiten, en situaciones extremas, utilizar plataformas como Tor para asegurar el anonimato de los usuarios, o permitir al mismo Twitter convertir SMS en tuits.

Lo que se equipara a lo que sucedió en Egipto recientemente: los ciudadanos llamaban a un teléfono y la plataforma de Google los convertía en mensajes.

La tecnología está lista para crear ciberciudadanía. Sólo falta que los usuarios les den el uso que aporte. He ahí la diferencia. 

» Contexto

Un fenómeno de sólo 5 años

Cinco años después del primer tuiteo, Twitter se ha consolidado en un adalid de la comunicación moderna gracias a un sistema de mensajes cortos que logró ganarse el respeto social por su utilidad en situaciones de crisis.

El 21 de marzo del 2006, Jack Dorsey (@jack), cofundador de esa red junto con Biz Stone (@biz) y Evan Williams (@ev), creó el tuiteo que dio inicio a un servicio que hoy cuenta con más de 200 millones de usuarios en todo el mundo. En abril de 2007 Twitter se convirtió en una empresa y en 2009 floreció como fenómeno mundial. EFE.

» Tres puntos de vista


Las redes potencian  participación y  construcción de país.

Diego Molano Vega,
Ministro de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones. 

"Las redes potencian la participación, construcción conjunta de país y empoderamiento ciudadano. Con estas estrategias, las redes no son las que se potencian. 

En realidad las redes lo que hacen es potenciar la participación, la construcción conjunta de país y el empoderamiento ciudadano, entendiendo claramente que las Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (TIC) no son el fin, son el medio, y que su buen uso, apropiación y aprovechamiento, benefician a la sociedad. 

No debemos olvidar que lo más importante de las TIC son los seres humanos". 

Una herramienta útil que debe ser bien manejada y verificada

Víctor Solano,
Consultor en temas de comunicaciones y redes sociales

"Twitter pasó del estado en que los primeros usuarios respondían religiosamente a la pregunta de "¿qué estás haciendo?" a convertirse en una verdadera red de encuentros entre usuarios, ideas, sentimientos y noticias. Cada vez más es una herramienta muy empleada, aunque es pertinente y obligatorio ser escépticos ante todos los contenidos en la red. Por supuesto, aquellas cuentas de periodistas o de medios de comunicación que han logrado mantener una reputación o la han heredado de sus presencias tradicionales, tienen el imperativo de mantener la credibilidad con tareas clásicas en el periodismo: verificar, contrastar información y ser pertinentes".

Las redes van desde la creación colectiva al trabajo colaborativo

Yan Camilo Vergara Gallo,
Gerente de Medellín Digital

"Las redes sociales permiten trabajar en la Innovación abierta, un concepto que permite hacer la  transición de la creación colectiva hacia el pensamiento innovador trabajado desde la colaboración. En este modelo de  trabajo colectivo no se pretende defender una idea sino que se trata de aportar a una iniciativa de trascendencia social. Se materializa cuando, por ejemplo, se crea un grupo en Facebook, y a  partir de allí, se pide retroalimentación, que va evolucionando la idea. Con ello se produce la creación colectiva abierta conectada con un objetivo y un foco claro".